miércoles, 31 de agosto de 2011

La última estación, by Michael Hoffman

La verdad es que antes de ver esta película desconocía por completo todo lo relativo a la apasionante vida de León Tolstoi. No sabía que en un momento dado, en un arrebato de conciencia social, decidió renunciar a todas sus pertenencias y lideró un movimiento basado en el respeto a la naturaleza, el celibato, el vegetarianismo y la abolición de la propiedad privada. Ni sabía esto ni sabía que llegó a convertirse en algo así como un gurú, un guía espiritual para la nación rusa. Joder, llegó a ceder los derechos de autor de sus obras a la humanidad. Madre mía, si la SGAE levantara la cabeza!

Pero vamos, de todo esto no me he enterado por la película sino porque, movida por una irreprimible curiosidad, me he metido en Google y me he empapado bien del movimiento tolstoiano. Sabia decisión, porque de la historia que nos cuenta Michael Hoffman lo único que he sacado en claro es una especie de batalla campal por los derechos de autor entre la avarienta señora de Tolstoi (eso sí, interpretada por una soberbia Helen Mirren) y los cabecillas de la "secta". Vamos, una vulgar historia de luchas hereditarias. Del trasfondo del movimiento, de la filosofía tolstoiana, de lo que ese hombre tuvo que vivir, ver y pensar para semejante cambio radical en su vida nasti de plasti. De ahí mi malsana curiosidad y mi posterior batida por los mundos de google.

No dudo de que el director intenta centrar la historia en las relaciones personales del ilustre escritor con su temperamental esposa, pero todo lo que he leído posteriormente sobre el personaje me parece tan fuerte y tan apasionante que me cuesta aceptar que toda su intensa y prolífica vida se haya visto reducida a este profuso relato de peleas conyugales y conflictos de familia. Vamos, el "Corazón corazón"  de los amantes de la literatura rusa. Manda huevos escribir "Guerra y paz" para que terminen recordándote como ese señor que no paraba de discutir con su señora.

martes, 30 de agosto de 2011

23-F, by Chema de la Peña

Quieto todo el mundo! Esto es una frikada! Y ésta que suscribe, como friki entusiasta y natural, va a elaborar un catálogo de las múltiples razones por las que nadie debería perderse este paradigma universal del frikismo cinematográfico. Ahí van mis razones:

1. Tejero (Paco Tous). El hombre-objeto que dio relevancia internacional al bigote patrio y al tricornio benemérito. Fashion total.

2. Armada (Juan Diego). Ese famoso señor que ha pasado a la historia de España porque "ni está ni se le espera".  Como yo a George Clooney.

3. El rey (Fernando Cayo). Por fin un Juan Carlos que habla normal, ya era hora! Intachable, incorruptible, certero, sin dudas, sin vacilaciones. Seguro de sí mismo, ese hombre de verdad que los anuncios de colonia han introducido en el imaginario colectivo.

4. La familia real. Qué majetes! Mientras el rey salvaba España ellos mirando a papá trabajar y aprendiendo la "pofesión". Ayyyys, qué más quisiera yo que mis hijos fueran la mitad de aplicados y tuvieran tantísima vocación. Será que no los estoy educando bien. Cuando yo tengo problemas en el curro no me hacen ni puto caso. Niños éstos! Lo que hace una buena sangre azul con pedigrís.

5. Sabino Fernández Campos, el secre del rey. Alucinante, todo el día colgado al teléfono mientras su jefe espía lo que dice pegando la oreja al auricular. Majestad, por favor, está muy mal escuchar las conversaciones ajenas. Y una se pregunta: es que en la Zarzuela por aquellas fechas no había teléfonos supletorios para estos menesteres? Qué feo un rey ahí pegando oreja pa pillar onda, Juanqui.

6. Los políticos, sobre todo Felipe González y Alfonso Guerra. Sólo les ha faltado un "Ozú, quillo, que ette tío tá mu loco y noj vamatá a tó". Inolvidable la frase de Felipe: "Qué paí, Alfonzo, qué paí"

7. El momento confrontación Tejero-Suárez. "La culpa es suya". "No, es de ustedes". "No, toda suya". A qué me suena esto? Ah, sí, Zapatero-Rajoy. Este país es un puro bucle. Llevamos con el mismo guión algo así como siete mil años.

Y lo más friki: por qué este alegato exculpatorio hacia la corona, si nadie la ha acusado de nada? Por qué el rey no duda ni un instante? Por qué desde el principio hay que dar a entender con tanto aspaviento lo horrorizado que está? Habéis oído aquello de "excusatio non petita... accusatio manifesta"? Y no quiero insinuar nada, que sois muy mal pensaos.

lunes, 29 de agosto de 2011

La lista de Schindler, by Steven Spielberg

La película está rodada en blanco y negro, y creo que esta decisión es perfecta para una historia en la que sólo hay blancos y negros, y los grises o marrones simplemente brillan por su ausencia.

Entiendo que Spielberg, por su doble condición de judío y de persona normal con sentimientos, se sienta conmovido e indignado por el drama del Holocausto judío. Salvo a algunos desalmados eso nos pasa a todos, aunque no compartamos su religión. Lo que ocurre es que el cine tiene que ser capaz de mostrarnos la realidad con sus matices; no puede ser que en casi todas estas historias sobre el nazismo nos representen una somera imagen bipolar sin claroscuros: los verdugos malos malísimos a un lado (todos, salvo el nazi Schindler) y las víctimas buenas buenísimas al otro. Y punto. No intentes ver más allá ni admitas grietas en este planteamiento porque en seguida serás tachado de negacionista o pronazi o algo aún peor.

La peli tiene dos objetivos básicos: zaherir conciencias y provocar el llanto. Es imposible no llorar en un momento u otro (habría que ser de piedra) y no sentir un sentimiento de culpa universal por lo hijaputa que puede llegar a ser la raza humana. Esos dos objetivos los consigue con creces. Ahora bien, desde un punto de vista intelectual su mensaje es tan simple, tan plano, tan evidente, tan falto de matices y sutileza, tan sin fisuras que no puedo sino rechazar por completo este torpe intento de hacer comulgar con ruedas de molino al personal. De un tío como Spielberg siempre espera una mucho más, aunque claro, con este grado de implicación emocional del director en la historia, tampoco se le pueden pedir peras al olmo.

Qué fue de Baby Jane?, by Robert Aldrich

Son siempre las víctimas tan víctimas y los verdugos tan verdugos? Son intercambiables sus papeles? Ésta es una de esas películas que te hace plantearte muchas cosas sobre el complicado mundo de la victimología.

Es obvio que Baby Jane es una desequilibrada, en eso estaremos todos de acuerdo. Y da miedo, sí. Pero es que no da miedo su hermana Blanche? No produce pavor ese regodeo en su papel de víctima, ese trato a la vez sumiso y paternalista hacia Baby Jane? La relación entre ambas es tan enfermiza, tan mutuamente dependiente y está tan corrompida que es imposible discernir hasta dónde llega la locura de una o de la otra, o su maldad o su capacidad de manipulación. En este aspecto el final es bastante revelador.

Nada que objetar en el tratamiento de los personajes; el guión es realmente sobrecogedor y las dos actrices están bestiales. Sin embargo hay fallos imperdonables en una obra por lo demás tan cuidada, fallos que hacen que pierda parte de su credibilidad. Por ejemplo, no se entiende demasiado bien que Blanche, teniendo una vecina a dos pasos con la que podría comunicarse verbalmente sin problemas, parezca tener esa angustia por su incomunicación forzada. Y otra cosa que no cuadra demasiado bien son los tiempos de Baby Jane en relación a los de Blanche. Cómo es posible que en el tiempo en el que Blanche escribe una escueta nota de desesperación y la lanza por la ventana, Baby Jane haya podido ir a la ciudad en su coche, entrar en el banco, discutir con la cajera y volver? Pues ésta y otras incongruencias narrativas son las que le quitan un montón de puntos en mi valoración.

viernes, 26 de agosto de 2011

Master and Commander: al otro lado del mundo, by Peter Weir

Definitivamente la navegación marítima no es lo mío. Cada vez que me proponen hacer un crucero o incluso montarme en un ferry sólo cinco minutos se me representa ipso facto la tragedia del Titanic, o la del Poseidón, o una tempestad tipo Master and Commander, y decido quedarme en tierra. Que no me gusta que el suelo se mueva bajo mis pies, vamos.

Yo no le voy a discutir a nadie que ésta sea una magnífica película de aventuras; probablemente lo es. El problema es que yo no me he enterado de nada. Entre el indescifrable argot naval, las constantes tempestades, neblinas, humaredas y confusas batallitas, y el poco interés que le pongo cuando una panda de señores decide pelearse contra otra por razones que se me escapan... me he quedado a dos velas. Y nunca mejor dicho.

A mí, sacándome de "Al abordaje", "a estribor" y "a babor", todo lo demás que se diga es complicarme la vida inútilmente. Y nunca me entero en estas películas, cuando llega la lucha cuerpo a cuerpo, de quién es quién y cómo saben quiénes son los malos y los buenos. Como además no llevan uniforme, que es lo único que podría distinguirlos, el lío está asegurado. Para mí todo es un totum revolutum y desde luego si yo tuviera una espada en una situación de ésas la lanzaría indistintamente contra todo bicho viviente y que sea lo que dios quiera. Eso sí, alucinante cómo se ponen los tíos de ron. También para llevar una vida perra de ésas, todo el día subiendo y bajando velas, lo mejor es estar borracho.

miércoles, 24 de agosto de 2011

Malas noticias (Too big to fail) (TV), by Curtis Hanson

Personalmente no me ha enseñado nada que no supiera. En estos 3 años de crisis que llevamos, desde la caída de Lehman Brothers, he leído tanto y he recibido tanta sobredosis informativa sobre economía, mercados, hipotecas basura y estados financieros que lo que me cuenta esta película me lo sé de pe a pa.

En un momento dado uno de los protagonistas dice algo así como:  "Si no fluye el crédito, no se compran casas, las empresas no pueden pagar a sus empleados, no se llenan las estanterías... todo se hunde. El crédito es el que hace que funcione la economía, pero si falla puede hundirla en cuestión de días." Y ésa es la madre del cordero: las hipotecas basura dieron lugar a los activos tóxicos, que terminaron por copar el mundo financiero, y cuando el precio de los inmuebles se estancó y descendió todo se fue al carajo. Adiós dinero, adiós crédito, adiós confianza de los inversores, adiós economía mundial.

Y esto, poco más o menos, es lo que nos cuenta Curtis Hanson en esta película trepidante sobre los entresijos de la mayor crisis financiera de la historia y los hilos ocultos que se estuvieron moviendo aquellos días entre los que manejan la pasta y el poder. Todo el proceso con el tiempo se ha repetido paso por paso tanto en Europa como en España. Hay quien reprocha a nuestros dirigentes que no supieran ver lo que se nos venía encima, pero viendo este film la pregunta es: alguien lo vio venir? Y si alguien lo vio venir, por qué no hizo nada para evitarlo?

Y aquí seguimos, 3 años después, todavía mareando la perdiz y al borde de una segunda recesión si cabe más gorda que la anterior.

Y de la prometida regulación del mercado financiero que aquellos días estaba en boca de todos los dirigentes políticos, alguien sabe qué fue? Alguien se acuerda ya de lo de la "refundación del capitalismo"? Alguien ha visto refundarse algo? O por lo menos regularse? Hemos aprendido algo? Hagan sus apuestas, señores; yo ya tengo la mía.

martes, 23 de agosto de 2011

Phillip Morris, te quiero!, by Glenn Ficarra y John Requa

Phillip Morris que estás en los cielos... Nooooo, fumadores del mundo, no os hagáis ilusiones. Esta peli no va de tabaco ni de compañías tabaqueras. Esta peli va de un niño que cuando mira al cielo ve nubes con forma de polla y que de mayor ve pollas a destajo, hasta que encuentra la del gran amor de su vida, Phillip Morris, con la que decide quedarse para siempre jamás. Por tanto estamos ante una comedia romántica, aunque eso sí, un poco especial. Especial porque los dos protagonistas se conocen en una cárcel, en la que vivirán los momentos más intensos de su historia de amor, y especial también porque Steven Russell, el personaje que interpreta Jim Carrey, es un verdadero fenómeno de la estafa, el engaño, el escapismo y la ingeniería financiera. Un pillo con todas las letras, vamos.

En realidad el gran hallazgo de la película es este personaje, mucho más interesante, dónde va a parar, que el de su amado Phillip Morris,  interpretado con corrección por Ewan McGregor. Jim Carrey, como de costumbre, hace una profusión de muecas, derroche de paroxismo y frenesí interpretativo, lo que sin embargo a este papel le viene como anillo al dedo. Es imposible plantearse a un personaje como Russell sin el histrionismo y la exageración de Carrey.

Hay que decir que, por increíble que parezca, esta historia está basada en hechos reales. En ese aspecto me recuerda muchísimo a "Atrápame si puedes", de Spielberg. Tanto el personaje que interpretaba DiCaprio en aquélla como el de Carrey en ésta son auténticos fenómenos de la naturaleza; su capacidad de manipulación y engaño, su inteligencia, su intuición, sus escapadas de la cárcel, su brillantez delictiva... en fin, no puedo menos que rendirme a los pies tanto de ambos actores como de sus personajes.

En definitiva, una peli muuuuy divertida, un personaje inolvidable y cine de buena calidad.

Ah, y sorpresa final. Y hasta aquí puedo leer.

lunes, 22 de agosto de 2011

Mars Attacks!, by Tim Burton

El panorama cinematográfico de la noche se mostraba desolador; ni una sola de las películas a elegir pasaba del 6 en Filmaffinity, salvo una: "Escrito bajo el sol", de John Ford. Leo un par de críticas y paso: John Wayne, patrioterismo a tope...Puaggggg! Mira, qué necesidad tengo yo de eso? Total, que me decido por "Mars Attacks!", que parece que hay cachondeo, que está catalogada como sátira política (mola) y desde luego el reparto es estelar: Nicholson, Glenn Close, Annette Bening, Pierce Brosnan, Danny DeVito, Martin Short, Natalie Portman, Rod Steiger... Coññño, aunque sólo sea por verle el careto a algunas de mis estrellas favoritas, esto hay que verlo. Vamos allá.

Nooooooo, craso error. En qué me equivoqué esta vez? Elemental, aunque no supiera verlo a tiempo: si no te gustan las películas de marcianos, si de hecho no ves nunca películas de marcianos, si incluso odias las películas de marcianos... QUÉ COÑO HACES VIENDO UNA PUTA PELÍCULA DE MARCIANOS?????????

Ah, bueno, que era una parodia! Y qué? No deja de ser otra asquerosa película de marcianos. Tan aburrida, soporífera, espantosamente ruidosa y pesada como todas sus congéneres, si no más, porque encima pretende ser graciosa y hacer reir y tú te has puesto a verla por eso, y te has comido una mierda, lo que la convierte en mil veces más vomitiva aún que todas sus hermanas. Y volvemos a la pregunta del millón: QUÉ COÑO HACÍA YO VIENDO ESTA PUTA PELÍCULA DE MARCIANOS??????

Malas tierras, by Terrence Malick

Vamos a ver cómo explico yo esto. Se juntan un psicópata descerebrado con menos luces que un cayuco y una adolescente con un pavo encima que no cabría en el horno de un crematorio, y el empanao, en un momento de irritación, le pega un tiro al papá de la niña. En éstas que la nena, aparte de un minúsculo sofoncocillo inicial de nada, se lo toma con filosofía y decide pegarle fuego a su casa con el cadáver del viejo dentro y partir a recorrer mundo con el asesino de su progenitor. Mola, eh?

Bueno, esta historia está basada en un hecho real, cosa que no me extraña porque de adolescentes gilipollas y/o pirados está el mundo lleno y parece ser que lo ha estado toda la vida de dios. Lo que ya es más difícil de creer es que la parejita en cuestión pudiera llegar a ser tan sumamente insulsa, insustancial, anodina y vacua. De verdad, no es que yo tenga muy buena opinión de los quinceañeros, pero a este grado de estupidez morrocotuda tengo muchas dudas de que puedan llegar. Los diálogos entre las dos lumbreras, de verdad, son para pasar por méritos propios a la antología de la memez cinematográfica.

En fin, hay quien dice que Martin Sheen y Sissy Spacek (la de Carrie) hacen dos interpretaciones memorables, pero yo sólo he visto a uno haciendo una imitación bastante tosca de James Dean en "Rebelde sin causa" y a la otra poniendo cara permanente de boba, que no es que no tenga mérito, pero vamos, de ahí a considerar esto genial... pues no. Yo también sé poner cara de boba cuando me interesa y prometo que no es nada complicado. Al revés, es bastante fácil. Y lo de imitar el look de Dean, pues yo creo que Carlos Latre lo podría hacer igual de bien. No sé, para mí interpretar es otra cosa, algo más que imitar estilismos. Tal vez dotar de vida a un personaje, y a poder ser de vida inteligente, o al menos, sensitiva. Pero vamos, estos dos aparte de pegar tiros el uno y de mirar con la boca abierta la otra, lo de la vida interior como que no está hecho pa ellos. En fin, bodrio al canto.

sábado, 20 de agosto de 2011

Dulce persuasión, by Marcos Siega

No se puede ser más mala, más hijaputa, más psicopatilla y más retorcida con 15 años. Evan Rachel Wood da una lección magistral de interpretación que debería hacerla pasar a la historia de las malas malísimas del cine.

"Dulce persuasión" ha sido un impresionante descubrimiento, al que tampoco es del todo ajena la impagable presencia de un brillantísimo James Woods. Acidez, ingenio, ironía, finura humorística, brutal crítica social... Todo eso y mucho más contiene esta pequeña joya del cine independiente americano. No se salva ni dios de la quema, le da un repaso a todo y a todos: educación, familia, sanidad, valores patrios, religión, política, medios, sexo, cultura de masas...

A veces despotricamos de los USA (yo la primera) y nos olvidamos de que si algo bueno nos han enseñado a lo largo de su historia, de su cine y de su literatura es que muy a menudo saben reirse de sí mismos como los que más. Esta película no es otra cosa que un tremendo autoflagelo, pero hasta para darse de hostias sin aburrir al personal hay que tener arte. Chapeau, Siega, lo has bordao.

viernes, 19 de agosto de 2011

El golpe, by George Roy Hill

En cuestión de pelis de timos es la más grande, la madre de todas las madres, la lección magistral, el manual, el summum, la guía espiritual de todas las pelis de timos que después de ella en el mundo han sido. La musa indiscutible. Sin "El golpe" la historia del cine hubiera cambiado muy sustancialmente porque ha habido tantas imitaciones, tantos homenajes más o menos velados, tantos plagios, que es difícil imaginar el mundo sin ese tremendo timo y por supuesto sin esa maravilla de música del grandísssssimo Scott Joplin. Nanananananananá nanananananananananá.

Y una vez dicho esto y reconocidas las mil virtudes de la película, tengo que decir que después de haber visto los cientos de imitaciones, homenajes y plagios, "El golpe" se convierte en una cinta más que previsible y de un interés cinematográfico casi histórico. Entiendo perfectamente que la gente que la vea por primera vez y que antes haya disfrutado de alguna de sus "hijas" no le encuentre el encanto y la genialidad que le encontramos los que descubrimos el mundo de la picaresca gamberra a través de ella. Es la terrible consecuencia de convertirse en mito, que tus propios imitadores terminan por asfixiarte a base de explotarte sin compasión. O si no, que se lo pregunten a Elvis.

Eso sí, coincido con algunas críticas en algo: el papel de Dimitra Arliss como camarera que encandila a primera vista al bello Redford es tan increíble como si se lo hubieran dado a Rafaela Aparicio. Resulta alucinante que con un casting tan logrado y tan brillante, la hayan cagado de gordo con las dos secundarias partenaires. Porque sí, lo de Arliss canta a la legua, pero qué me decís de lo de Eileen Brennan de novia del dios Newman? Por favooooooooooooooorrrr! No habría alguna manera de rehacer esa parte?

miércoles, 17 de agosto de 2011

El habitante incierto, by Guillem Morales

No somos todos un poco voyeurs y un poco exhibicionistas? No nos asusta la soledad? No sentimos cierto "horror vacui" ante lo desconocido? Todas estas cualidades de la condición humana constituyen el telón de fondo de esta estupenda película de suspense de Guillem Morales, un director hasta ahora desconocido para mí pero que apunta maneras bastante interesantes.

La historia tiene dos partes claramente diferenciadas: la primera, en la que el protagonista se siente observado, y la segunda, en la que se convierte él mismo en observador. A lo largo de cada una de ellas se nos van planteando distintos "misterios" que quedan resueltos por completo en un final verdaderamente redondo. Sinceramente no entiendo a los que dicen que no se han enterado de nada; para mí el desenlace es suficientemente explicativo, salvo que se sea muy torpe o que no se haya estado atento a los detalles.

Magnífica la interpretación del protagonista, y francamente memorable el doblete de Mónica López, una actriz a la que descubrí en "En la ciudad" de Cesc Gay, donde ya me impresionó bastante. Aquí está sencillamente fantástica. Lo del doblete lo entenderéis cuando veáis la peli.

El suspense se mantiene prácticamente durante todo el metraje, lo que tiene mucho que ver con la estupenda banda sonora y con un manejo de la cámara realmente magistral. Los que hablan de recursos fáciles probablemente no deben de saber que a estas alturas está ya "to inventao".  Pero son muy pocos y escogidos los que usan esos recursos con maestría, y éste es uno de ellos.

No me extraña, como he leído por ahí, que los yanquis estén interesados en un remake. Miedo me da lo que pueden hacer, la verdad.

martes, 16 de agosto de 2011

Déjame entrar (Let me in), by Matt Reeves

Todo lo que leo sobre esta película hace referencia  a su condición de remake; a unos les parece bien, a otros mal, unos prefieren la original, otros piensan que la copia la supera, y algunos directamente consideran que cualquier remake, por el hecho de serlo, debería ser condenado al vertedero de la crítica.

Yo confieso que no he visto la original, lo cual me ayuda bastante a valorarla por si misma sin hacer referencia a la película sueca. Como tampoco he leído la novela en que se basa, también sueca, me evito igualmente tener que hacer referencia a ella y hacer algo tan poco productivo como comparar cine y literatura. Mi opinión, por tanto, se basa exclusivamente en esta versión, y a ella me remitiré.

A mí me ha parecido una excelente película, aunque no de terror vampírico. La verdadera historia de terror tiene lugar en la escuela y en los abusos a los que es sometido el niño protagonista. Al lado de este espanto, la supuesta niña-montruo es un angelito. La evolución psicológica del muchacho y su lucha por superarse van unidas al hecho de que la única persona que le muestra alguna empatía y se percata de sus problemas es la chica. Toda la historia gira en torno a esa soledad compartida que para mí es mucho más interesante que la trama sanguinolenta, un tanto exagerada para mi gusto.

Y si esto fuera poco la música es verdaderamente impactante. He leído por ahí que es del mismo compositor de "Up" y de "Perdidos". Sinceramente, de lo mejorcito que he escuchado últimamente en bandas sonoras.

La recomiendo encarecidamente tanto a los amantes del cine de terror como a sus detractores porque no es exactamente una película de terror. No sé por qué a ratos me recordaba a "Carrie", otra historia que siempre me ha sobrecogido mucho más por su trasfondo dramático que por su capacidad para provocar miedo.

martes, 9 de agosto de 2011

Fuera del cuerpo, by Vicente Peñarrocha

No hubiera estado mal del todo haber estado fuera de mi cuerpo mientras veía esta película, por ejemplo, tomándome mentalmente unas cervecitas en una terraza o haciendo taichi o cualquier otra actividad. Es decir, haber dejado mi cuerpo, cual carcasa, delante de la tele y yo haberme largado por ahí a aprovechar mi tiempo en algo guay. Desgraciadamente no domino el arte del viaje astral hasta ese punto. Una pena.

De todas formas, tengo que agradecerle al tipo este, Peñarrocha, que haya hecho un esfuerzo por dirigir una peli que no vaya ni de la guerra civil ni de la posguerra.  Eso tiene un mérito y hay que reconocérselo.

También sería importante agradecerle que no sea demasiado ruidosa; no hay tiros ni explosiones ni esa clase de cosas que hacen que te pegues sustos mortíferos cuando estás dormida frente a la tele. Es superdesagradable estar viendo un bodrio y quedarte sopa y que de repente estalle un petardo en la peli y te despiertes sobresaltada al borde del infarto. Este tío no hace esas cosas, se ha portado, te puedes dormir sin problemas viendo su truño. Sólo por eso le voy a poner un uno, qué coño, que se lo ha currao.

domingo, 7 de agosto de 2011

Por qué las mujeres siempre queremos más?, by Cécile Telerman

La cosa no podía pintar peor. Reunión de petardas con problemas sentimentales, título terrorífico, sinopsis con tufo feministoide... Genial, la típica película para poner a parir. Una especie de "Bridget Jones" o "Mujeres desesperadas", algo para abominar, aborrecer, echar hasta la primera papilla, desfogarse hasta la médula... el sueño de cualquier crítico demoledor, o sea, yo. Justo lo que buscaba. Pero no.

Confieso que hoy no es el mejor día de mi vida y que ver cine es lo último que me apetecía. Elegí esta película porque necesitaba olvidar y porque creí que sería tan insulsa y tan patética que mi desolación se volvería rabia y por fin podría despotricar contra el mundo, que es lo que quiero, lo que necesito, lo que me gustaría hacer. Y milagrosamente resulta que a ratos me he reído (diossss mío, parecía imposible), que casi durante un par de horas he conseguido olvidar mis propios males, y que las heridas de sus protagonistas han supuesto un pequeño analgésico temporal para las mías, que son hondas e incurables.

Ayer perdí a mi Mojito y llevo horas y horas de terrible desolación, de búsqueda infructuosa y de desesperanza. Pero no sé por qué, durante un ratito, los problemas de Juliette, Florence y Marie han hecho que mi dolor se diluyera, se volviera algo menos amargo; como si lo estuviera compartiendo con ellas.

Tengo una amiga que me reprocha que mis críticas son bastante irracionales y responden en gran medida a mis estados de ánimo. Lleva razón. Hoy es uno de esos días en los que me hubiera gustado matar, y sin embargo, aquí estoy perdonándole la vida a esta película y dándole mi beneplácito. Y por qué? Pues sólo porque ha conseguido entretenerme un rato y hasta hacerme sonreir.

Esa labor era harto difícil esta noche. Sí, es verdad que estoy sensible, pero también lo es que hubiera podido maldecir y despotricar y hasta gritar si hubiera visto algo parecido a "Sexo en Nueva York", que era lo que esto parecía. Pero no se le parece, para nada. Las historias de estas tías son reales: matrimonios amargos, cuernos, soledad, miedo, tiempos muertos... Sí, es cierto, también hay momentos "bridget", por qué negarlo, pero ni mil bridgets podrían esta noche haber hecho conmigo lo que ha logrado esta sencilla comedia romantique a la francesa. Sólo por eso, gracias, Cécile Telerman.

Mojito, si vuelves me retractaré de toda esta pavada.

Vuelve, por favor.

viernes, 5 de agosto de 2011

Sin perdón, by Clint Eastwood

Con perdón, menudo chasco. Jamás en la vida me pude imaginar que la famosísima, oscarizada  y casi mítica "Sin perdón" en realidad era una peli de risa. Es cine cómico en estado puro. Y puedo demostrarlo.

Esto es un cegato que ve menos que pepeleches, un abuelete exasesino arrepentido y un forajido jubilado negro (con perdón, de color, bueno, afroamericano, que se dice ahora) que se juntan para matar a unos tipos que le han rajado la cara a una puta. Jajajajaja!

No, joder, que no es un chiste; éste es el argumento de "Sin perdón".  Lo prometo. Si fuera un spaguetti-western se podría haber llamado "El negro, el viejo y el cegato". A mí la peli me ha inspirado incluso para escribir un monólogo del club de la comedia.

Clint, que hace el papel de viejo blanco (por contraposición con el viejo negro, interpretado por Morgan Freeman) está supergracioso en plan autoflagelo, todo el tiempo repitiendo "yo ya no soy un asesino. Mi querida esposa me cambió". O bien, cuando le preguntan por sus tiempos mozos de sicario a sueldo: "no me acuerdo, estaba siempre borracho". No sé, es como una mezcla de alcohólico anónimo y testigo de jehová. El personaje es ideal para un monólogo de partirse el culo.

Y ya si veis el final... bueno, mejor no lo cuento. De verdad, hay que verlo. Ahí es donde ya, si has conseguido contener la vejiga hasta entonces, tienes la meada garantizada. Uysssss, con perdón.

jueves, 4 de agosto de 2011

El imperio del sol, by Steven Spielberg

Que Steven Spielberg es un cineasta con sello propio y una personalidad aplastante creo que a estas alturas está fuera de toda duda; ahora bien, que eso presuponga automáticamente calidad es más que discutible. La película es formalmente impecable, la fotografía prodigiosa, el reparto de lujo, en eso es un clásico Spielbergiano, y por ahí nada que objetar. Qué falla entonces? Pues vuelve a fallar la historia, como le pasa a menudo a este hombre.

Un niño bastante tontorrón, pijo y repelente se pierde durante la II Guerra Mundial de una forma completamente inexplicable y va vagando por ahí hasta que cae en manos de una especie de mentor mafiosillo y buscavidas, eso sí, magníficamente interpretado por John Malkovich, con el que sobrevive trampeando hasta que son apresados por el ejército japonés y encerrados en un campo de prisioneros. La supervivencia en el campo es la clave de la película y es donde principalmente decae la trama y se hace cansina y aburrida. En una palabra, un tostón.

De todas formas merece la pena verla por la impresionante puesta en escena; las imágenes de la guerra son verdaderamente impactantes. Y luego está la curiosidad de ver el debut de un jovencísimo Christian Bale, que aunque aquí hace un papel insoportable que incita seriamente al homicidio, con el tiempo llegaría a convertirse en un actor fascinante y asombrosamente camaleónico. Inolvidable su papel de pirado en "American Psycho". Sólo por eso le perdono a Spielberg este engendro infumable. Venga, Steven, 23 padrenuestros y 15 avemarías y ego te absolvo.

miércoles, 3 de agosto de 2011

No controles, by Borja Cobeaga

Vaya vaya vaya, qué bien, he ido a dar con el director de la famosísima y alabadísima "Pagafantas"! Y con un actor de los famosísimos y alabadísimos "Muchachada nui" y "La hora chanante". No he visto ninguna de estas afamadas y alabadas obras de arte pero estoy segura de que tienen que molar.  Joder, muchachada nui es un clásico, es serie de culto, ya sabéis, sólo apta para humores inteligentes y eso.

Yo, la verdad los he visto anunciarse unas cuantas veces y me he dado cuenta de que mi humor no es demasiado inteligente. Salía en la tele un payaso cantando algo así como  "Vivo con tu madre en un castillo" y luego un número para que llamaras y te bajaras la canción. Cuando veía el anuncio sólo podía pensar en qué clase de gente llamaría a ese número para bajarse la canción de la madre y el castillo. Bien, pues ahora lo sé.

Llamaría la gente que ha flipado con esta película y con "Juancarlitros", el nuevo icono de la cinematografía humorístico-inteligente-chanante. Ya tenemos dos grandes personajes inolvidables en el cine español: Torrente y ahora el Juancarlitros. Vienen a ser para nuestra cinematografía lo que para la americana serían Harry el Sucio, o Indiana Jones o mismamente Bond, James Bond.  Juancarlitros podría ser, por ejemplo, nuestro Woody Allen. Y claro, pues sí, así se entienden muchas cosas.

martes, 2 de agosto de 2011

Presunto inocente, by Alan J. Pakula

Sinceramente, me repatea que Harrison Ford se infle a ponerle los cuernos a su señora y haga el imbécil encoñándose estruendosamente de una compi del curro y que la sensación que dé es "pobre hombre, que se ve más buena persona que la mar, y que esa lagarrrrrrta con sus malas artes lo haya seducido y lo haya convertido en un pelele! Tía más guarrrrrrrrrrrrrrrra!" Ese Harrison, con esa carita de cachopan, de no haber roto un plato en su vida, atormentado, desesperado, tristemente babeante por los bien plantaos huesitos de la vil zorra.

Y la tía qué mala, qué cochina, qué ambiciosa! Una depredadora sin sentimientos, que ni siquiera lo quería una mijilla, ni le daba penita ni ná. Y esa familia tan modélica, con el niño tan mono, tan buen muchacho y tan simpático, que seguro que saca unas notas estupendas y no se pone piercings ni nada; y la señora de Harrison, la pobre mujer, tan enamorá de su marido, tan sufridora, tan dispuesta a defender a su familia con uñas y dientes, y gastándose la criatura una pasta en ropa interior sexi pa intentar seducir a un marido ya tan abducido por la otra garrapata que le importaría un pimiento que llevara las bragas de esparto.

Ufffff, qué cutrerismo, no? La cosa es que entretiene, y consigue tenerte con el alma en vilo, abominando de la guarra, sintiendo muchísima penita por el pobre Harrison y su ejemplar familia americana y alegrándote secretamente de que la zorra esté bajo tierra porque alguien se haya encargado de ponerla en su sitio. Pero luego, cuando acaba la peli, y te enteras de quién mandó al lagartón al otro barrio, y ya sales de la hipnosis te dices a ti misma, toda aturdida y obnubilada : "La virggggen, pero cómo me han podido colar esta gamba?"