viernes, 20 de enero de 2023

Machos alfa (Serie de TV), by Laura Caballero y Alberto Caballero

A ver si consigo terminar esta crítica sin recurrir a la abominable palabra que empieza por "empode" y termina en "ramiento".

Yo me he reído muchísimo con la primera temporada de esta serie, lo reconozco. En absoluto coincido con los que la critican por ridiculizar a los personajes masculinos porque los femeninos no se quedan muy atrás. La insoportable influencer, la señora casada que pierde el culo por un cachas, la que intenta exprimir a su ex usando a la hija como elemento de extorsión, la obsesionada por el sexo, las sucesivas taradas que uno de los protas conoce por Tinder... es que no hay por dónde pillarlas. La única que medio se salva es la hija adolescente que le busca novia al padre, que parece ser la más madura de todos.

Todos los personajes femeninos abusan de una u otra forma de sus parejas. Ellos dan bastante penita, la verdad. Y se agradece que, para variar, dejen de darnos la chapa con el pensamiento único, aunque paradójicamente para ello el recurso sea precisamente una supuesta crítica al "macho alfa". De hecho, yo al principio tuve muchas reticencias a ver la serie precisamente porque el título me echaba para atrás. Pensaba que probablemente sería un panfleto feminecio insoportable. Pese a ello le di una oportunidad, y me alegro porque me ha sorprendido agradablemente.

Evidentemente se trata de una parodia de la realidad, por tanto, todo es muy exagerado, pero perfectamente reconocible en el mundo actual. Los hermanos Caballero tienen una marca muy característica, tanto las situaciones que crean como los personajes suelen ser caricaturescos. Y tienen muy bien pillado el humor del gran público. A base de situaciones rocambolescas, enredos de vodevil y diálogos ágiles conectan muy bien con el espectador medio, que busca entretenimiento sin muchas complicaciones, sencillamente echarse unas risas sin complejos.

De todos los personajes me produce especial ternura el que interpreta Fele Martínez, ese señor de aspecto bonachón, amante esposo, impecable padre de familia, amable, trabajador, buen amigo... prácticamente la encarnación viva de la nueva masculinidad, que recibe como premio a su intachable comportamiento una coz como la copa de un pino. Y es que... trae más cuenta ir de machote que ser un buen muchachote.

sábado, 7 de enero de 2023

Días de navidad (Miniserie de TV), by Pau Freixas

1. Tengo que reconocer que el guion de esta historia es bastante rocambolesco, empezando por la propia locura cronológica. Hay tres episodios que representan tres navidades distintas en la vida de unas hermanas. Se supone que se sitúan en la adolescencia, la edad adulta y la vejez. Bueno, pues lo que en edad real supondrían 90 años de vida en la serie se reducen a 50. Y así tenemos a las hermanas en los años 40 con 15 años y en los dos mil con 65 aproximadamente. Que cómo lo han hecho? Pues ya me gustaría preguntarle la receta a Pau Freixas, el creador, porque a mí tampoco me importaría quitarme 25 añitos de encima así de un plumazo. Que me cuente el secreto.

2. Tengo que reconocer igualmente que los personajes son totalmente estereotipados. La hermana atontá, la rebelde y la feminista, el guardia civil cabrón de toda la vida de Dios, la inevitable mujer maltratada... Todos diciendo exactamente lo que se espera de ellos, sin saltarse una coma ni un punto ni medio párrafo. Hay poco lugar para la sorpresa, ésa es la verdad.

3. Y finalmente tengo que reconocer que algunas escenas son verdaderamente sonrojantes. Que he sentido a ratos una vergüencita ajena bastante considerable. Quien vaya a ver la serie que no siga leyendo este párrafo, pero concretamente la de la madre contándoles su secreto a las hijas en el comedor, segundos antes de desmayarse de la emoción, es para mear y no echar gota.

En fin, amigos, que la serie tiene bastantes lagunas, lagunillas y lagunones y que adolece de un montón de defectillos, y no tengo reparo en reconocerlos. Sin embargo he decidido darle una buena nota porque hay otros factores que, a mi parecer, compensan esos otros fallos. Paso a enumerarlos:

1. El elenco, sobre todo femenino. No puedo dar un voto negativo a un trabajo en el que han conseguido reunir a actrices de la talla de Charo López, Ángela Molina, Victoria Abril y muchas más, no voy a nombrarlas a todas. Baste decir que es lo mejor de lo mejor de lo mejor del cine español, tanto en talentos jóvenes como en consagrados. Sólo el hecho de ver a todas estas pedazo de mujeres juntas hace que merezca la pena tragarse los tres episodios, por muchos saltos cronológicos raros que haya, por mucho que los personajes no hagan justicia a sus intérpretes y por mucho que algunos diálogos  puedan hacer ruborizar a una cabra. Sigue valiendo la pena. Mención aparte merece la gran Verónica Forqué, que creo que hace aquí su último trabajo como actriz.

2. El marco idílico. El sitio es espectacular, la fotografía maravillosa y la decoración de la casa una pura fantasía. Teniendo en cuenta que soy una friki de la Navidad, que me encantan las pelis de sobremesa con profusión de adornos navideños, de luces, de arbolitos, de verdes, rojos y dorados, no puedo evitar sentirme agradecida de que por fin tengamos nuestra serie autóctona navideña. Y aunque no se canten los villancicos de nuestra tierra, aunque es verdad que el ambiente está un tanto americanizado y aunque sé perfectamente que es imposible decorar una casa en la vida real de esa manera, yo he disfrutado muchísimo con toda esa ambientación tan propia de estas fechas.

3. Por último, no puedo dejar de referirme a las reminiscencias cinematográficas tan evocadoras de la serie. Yo describiría la historia como una mezcla de "Mujercitas", "Secretos del corazón" y "Belle époque". Cierto es que carece de la calidad de todas ellas, pero ya sólo el intento de conjugar esas tres historias, hacer un totum revolutum y entregarnos el resultado, invitándonos a recordar grandes momentos de ese cine lleno de sentimientos, emociones y vivencias familiares, hace que tenga que dar las gracias a Pau Freixas por este trabajo. En definitiva,  podría resumir la experiencia como un "fin de fiesta navideño con un reparto de ensueño".