lunes, 13 de marzo de 2017

Un monstruo viene a verme, by Juan Antonio Bayona

Esta película para reflejar exactamente lo que es debería titularse: "Un monstruo coñazo viene a verme por las noches y me cuenta rollos morollos, para más delito con moraleja".

La historia es la siguiente: a un niño que lo está pasando fatal porque su madre se está muriendo se le aparece un monstruo pestiño, eso sí, con gran profusión de efectos audiovisuales, y se dedica a contarle historietas a cuál más insulsa y aburrida. Si yo hubiera sido el niño le habría mandao a la mierda de momento.

Para empezar me aburren los cuentos con moraleja, porque más que moraleja normalmente suelen llevar moralina. Y éstos en particular desprenden un tufillo a lo Coelho, así como a filosofía de rastrillo, un tanto flower, relativismo moral, ya sabéis: no todo es lo que parece, lo bueno y lo malo se entremezclan... esa clase de cosas que te sueltan los colgados cuando se han fumado siete porros y están ya muy pallá.  Y las historias de monstruos en las que el monstruo no da miedo me aburren más todavía. Un monstruo que se le aparece a un niño y el niño, en lugar de acojonarse, se pone a chulearle... eso qué mierda de monstruo es?

En fin, para los que se hayan aburrido soberanamente con esta insulsa historia de Bayona de monstruos  bonachones y pelmazos propongo un final alternativo y mucho menos pasteloso:

El monstruo se pilla una papa y deja de contarle al niño historias sosainas y se pone a contarle chistes de Eugenio imitando el acento catalán. El niño se parte el culo de la risa y al menos ya que su madre se está muriendo y su padre pasa de él y la abuela es un cardo por lo menos se echa un buen rato el chaval. Luego se aprende los chistes y los cuenta él en el colegio y todas las niñas se parten el culo con él y empiezan a pedirle de salir, con lo cual se convierte en el ídolo de su clase y los imbéciles que lo puteaban se van a sus casas con el rabo entre las piernas. La madre finalmente muere pero muere feliz de ver a su niño siendo el crack de su clase y con un gran futuro como humorista. Por su parte la abuela tiene un momento freak y decide casarse con el monstruo y se compran una autocaravana y se van a recorrer mundo con el niño. Y colorín colorado esta peli se ha acabado.

2 comentarios:

  1. Lo que propones al final me parece muy bueno. He llegado a este blog, en fin, no sabría explicártelo, y me he pasado un buen rato en él y no he parado de reír: inteligente, atrevido, y por fin, unas reseñas que uno no esperaría encontrarlas en los periodicuchos. Ahora está de moda los monstruos: Donde se esconden los monstruos, Un monstruo viene a verme y gigantes gilipollas que van de colegas.

    Un cordial saludo.

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    1. Hola errabundo Melmoth, me encanta tu nombre. Bienvenido a mi blog.

      Yo creo que con tanto monstruo en el mundo real ya es difícil asustar a nadie con monstruos de cine. No me extraña nada que el niño de esta película se pase al monstruo por el forro los cojones.

      Los vendedores de sustos deberían de reciclarse un poco. Van a terminar dando más penilla que otra cosa.

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