A mí hay una cosa que no me cuadra en esta historia. En serio, si se descubriera que existe vida inteligente fuera de este planeta (suponiendo que existiera vida inteligente dentro, que ya es mucho suponer), el problema fundamental sería cómo afrontarlo desde el punto de vista teológico?
O sea, vamos, que unos extraterrestres se ponen en contacto con nosotros y deciden darnos la oportunidad de que alguien acuda en representación de los humanos a parlamentar con ellos, y... el comité de selección estaría formado por predicadores, especialistas en humanidades y personalidades varias del mundo de la cultura? Qué te digo yo, Amador Mohedano, Kiko Rivera, la bruja Lola, Mario Vaquerizo...
O sea, vamos, que en ese supuesto no mandaríamos a un astronauta ni a un científico de probada experiencia en el campo de la ingeniería espacial, no. Para qué? Lo suyo es preguntar a los candidatos a llevar a cabo la misión: "oiga, cree usted en Dios?" Y nada, si dicen que no (que ya hay que ser gilipollas, sabiendo que te lo preguntan para que digas que sí), pues no puedes ir tú a la misión, porque no representas ya a la mayoría de la humanidad. Juaaaaaaaaaas!!!!!!
Joder, pero qué frikada se ha montado Robert Zemeckis, hossstia. Vale, que Jodie Foster lo hace muy bien y con su presencia le da cierta categoría a la cosa, pero coñññño, es que estamos hablando de una conexión interestelar... y ahí decidiendo sobre el tema curas, obispos, monjas, expertos en mitología clásica, y por supuesto Ferrán Adriá. Un poquito de por favor, Zemeckis! Es que es como si para decidir el menú de la última cena hubieran convocado a la Terremoto de Alcorcón y a Manolo el del Bombo. Pero qué me estás contando, colega?
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