Leo por ahí críticas que comparan esta película con una serie para mí inolvidable: "Aquellos maravillosos años", y claro, pico el cebo. Como era de esperar, se me atraganta. Esto se parece tanto a "Aquellos maravillosos años" como Belén Esteban a Gisele Bundchen.
Sí, se parece en que las dos transcurren en los años 50; en que están narradas por niños; en que hay una historia de amor como telón de fondo; tal vez en la estética... En fin, como la Esteban y la Bundchen, que son las dos rubias y delgadas, y hasta ahí llega el parecido.
No se ve por ninguna parte el ingenio de los guiones de la serie, ni el carisma de sus niños-actores, ni la chispa de sus diálogos. Ni Kevin Arnold y Winnie Cooper tienen nada que ver con estos dos adolescentes falsamente problematizados por conflictos forzados de difícil comprensión y chapucera resolución. Donde en "Aquellos..." había naturalidad, encanto, belleza y talento, aquí encontramos puro artificio, sosería, cutrez y estulticia.
De todo tal vez salvaría a la niña protagonista, interpretada razonablemente bien por Madeline Carroll. Y un cierto esfuerzo estético combinado con una ambientación cuidada que consigue hacerla agradable a la vista aunque en ningún momento llegue ni a conmover ni a enganchar. Si evitamos las odiosas comparaciones diría en un ataque de generosidad que hasta se deja ver.
Cualquiera tu crítica! ayer la vi y me pareció una belleza de película!
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