viernes, 4 de enero de 2013

Despertando a Ned, by Kirk Jones

Idílico pueblecito irlándés, idílicos abueletes, idílico paisaje, idílicas casitas, idílica lluvia, idílico buen rollito...

Llamadme bruja, pero yo es que tanta ternura, tanto humor blandito, tanta bondad natural y tanto personaje entrañable, no sé... me chirrían, me dan repelús, me sacan la vena asesina en serie.

Empezaría matando a Kirk Jones por parir el engendro. Luego a los dos abuelillos protagonistas,  estratégicamente diseñados para conmover hasta a un fósil del pleistoceno. Seguiría con el cura encantador, muy probablemente pederasta irlandés de pura cepa. Y no sé si conseguiría saciar mi sed de sangre con el horripilante niño de la película. No sé, pero con una buena metralleta... Tatatatatatatataaaaaa!!!!!

3 comentarios:

  1. Precisamente la vi ayer y me resulta una película redonda. Un guión milimétrico y ajustado hasta el final, con un plantel de actores formidable y llena de ironía, lúcida y siempre inteligente. Su clasicismo hoy puede ser tildado de trivial o sencillo, su tempo se convierte para otros en inapetencia fílmica, yo esbozo una sonrisa. Perdida en el tiempo recupera la ausencia de malicia y se enfrenta a un mundo donde sus bondades caen el el olvido.

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  2. Martínez, eres un blandiblú y un moñas.

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  3. ¿Blandiblú? eres más antigua que una monja. Si tú piensas que soy un moñas por apreciar tamaña película es que no has entendido nada. Hay quien le gusta La princesita y se queda tan campante. Tus abismos son tus abismos y los míos son otros. Algún día pensarás como yo o sentirás parecido después de ver muchas películas, o tan vez yo seré tú. En cualquier caso tu desprecio por el respeto que no el moñeo es digno de estudio. Confundir confundes nena. Cuídate que sin ti algunos perdemos mucho. Muak

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